martes, 18 de noviembre de 2008

Maravillosa addicción

Adicción que mala que es... es el impulso que te lleva a querer algo y no lo puedes dejar... En mi caso no es tan mala como parece, simplemente leo.

Y alimento esa adicción aun cuando no estoy leyendo, mi curiosidad inata me lleva a devanarme los sesos preguntándome que ocurrirá al pasar la página. Claro que esto suele ser un inconveniente porque estar solo en cuerpo en algunos sitios no es muy recomendable. Sitios como por ejemplo el instituto.

Suele ocurrirme que cuando leo un libro, no me gusta disfrutarlo poco a poco, prefiero pasar una tarde entera tras otra devorando páginas y páginas… Sumergiéndome en historias y hechos lejanos.



Y es esto lo que me ocurre a veces, estoy tan absorto que el tiempo pasa y no lo aprovecho. Pero bueno, ese estado no es permanente ni mucho menos, siempre hay veces en los que se nota más y en los que se nota menos. Sin contar con el momento mas trágico que hay. Que es cuando lees la última pagina, cierras el libro y lo sostienes con las manos, disfrutando de ese ultimo momento.

Dependiendo del libro puedes sentir cosas muy diferentes al terminarlo, puedes hacerlo con una sonrisilla, puedes hacerlo con gesto pensativo, puedes hacerlo con una lagrimilla y de mil formas más. Pero casi siempre sientes tristeza, es solo una ligera tristeza que viene dada por el hecho de que “ya esta, se ha acabado” y todas las sorpresas que habían y todos los misterios que aguardaban se te han desvelado.

Quizá dentro de algún tiempo lo volverás a coger y te volverás a deleitar con sus paginas.

Pero nunca será como la primera vez que lo tuviste entre tus manos...