domingo, 29 de junio de 2008

Cambio de planes

Hoy me disponía a escribir un post pesimista. No ha empezado muy bien mi legada a casa, llego a las 1:30 de la noche, con mi madre cabreada, me meto en el PC, vaya el servidor del juego esta caído…¿y ahora que hago?

Me meto en mi blog, rememoro viejos post y empiezo a escribir sobre que ya se ha acabado la “fiebre del blog”, cuando me quedo estancado escribiendo me paseo por unos cuantos blogs y no veo nada nuevo (y hacia tiempo que no me metía) entonces caí en mi revisión rutinaria en el blog de Diego.
Me mola un puñado y sobre todo uno de sus últimos post, el de
“Algo que sí echaré de menos”.

No sé, ha sido fantástico, después de leerlo se me han disipado todo el desánimo que llevaba encima, ha sido como una pequeña luz en la oscuridad que iba aumentando en mí. Se podría decir que me ha dado esperanza.
De hecho gracias a ese post ahora escribo esto y mañana me iré a correr.(esque me daba pereza y ahora estoy mas animado)

En general, este post va dedicado a las tonterías que son los detalles y lo que nos pueden influir (para bien).

Un abrazo y que la fuerza os acompañe.

PD: Para Diego: Al final me he quedado un poco descolocado… ¿a quien vas a echar de menos? Ya te preguntaré.

domingo, 8 de junio de 2008

Cruce de caminos

Hoy me ha ocurrido una cosa curiosa.
Estaba yo volviendo del rol, cuando entré en el metro. Iba con un poco de prisa, así es que cogí el primer metro que salía.

-Vaya, este no es el que lleva directo a angel guimerá, da igual, bajo en colon y de allí llego.

Estando apunto de bajar en Colón, me pregunta una mujer de unos 30 y tantos:

-¿Oye este no va a angel guimerá, no?
-No pero para llegar, bájate en esta, y te diré el metro que tienes que coger.
-Vale muchas gracias.

Bajamos y le indico. El primer tren iba a aeroport y el segundo a torrente.
Así es que le indico que coja el 1º que pase. Y una pareja que también quería llegar a angel guimerá nos escuchó. Pero de eso me di cuenta despues.
La sorpresa fue que cuando cogimos el tren no nos fijamos que los horarios no coincidían y nos metimos en el que no era. Cuando me doy cuenta de esto, me acercó a ella y le digo:

-Mira, perdona que el panel no estaba bien y ahora este tren nos lleva a la 1º parada donde me as preguntado.
-Huy que mal, ya decía yo que esta ultima parada era muy parecida a la otra.
Nos reímos de nuestra mala suerte un rato y me dice:
-Y además esa pareja de enfrente te ha oído indicarme el camino y ellos también se han equivocado.

Nos empezamos a reír. Yo no me había percatado de que la pareja estaba al lado nuestra la primera vez que la mujer me preguntó. Y ¡ala! La había liado cosa mala.
cuando volvimos a la parada inicial y ya por fin lo hicimos todo bien. De camino estuvimos hablando de trivialidades y yo estaba llamando a casa para avisar de que llegaba media hora tarde, pero no me lo cogían.
Al final nos despedimos:

-Venga que llegues pronto a tu casa y que no te echen la bronca
-Vale, gracias. Hasta luego.

Diez minutos mas tarde subía mojado las escaleras de mi casa, no estaba mi madre, así es que no pasó nada.

Parece un simple anécdota, pero me ha gustado mucho ver como de una tontería al final he acabado compartiendo viaje y risas con una desconocida, en el metro de Valencia, donde cada uno va a lo suyo.